Mostrando entradas con la etiqueta Cine. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Cine. Mostrar todas las entradas

martes, 11 de febrero de 2014

Muere la actriz Shirley Temple, la «niña prodigio» del cine, a los 85 años

Muere la actriz Shirley Temple, la «niña prodigio» del cine, a los 85 años
Muere la actriz Shirley Temple, la «niña prodigio» del cine, a los 85 años

Alcanzó la fama en Hollywood en los años 30 como intérprete infantil con películas como «La pequeña princesa» y «Ojos cariñosos»

La actriz y diplomática estadounidense Shirley Temple, «niña prodigio» del cine, ha muerto a los 85 años, según ha anunciado su familia a través de un comunicado difundido por la agencia Reuters.
Su muerte se produjo el pasado lunes en su hogar de Woodside, California, por causas naturales. «Queremos recordarla por haber tenido una vida de grandes logros como actriz y como diplomática... Nuestra querida madre, abuela y bisabuela», reza el comunicado emitido por la familia.
Temple alcanzó la fama de forma precoz como actriz en los años 30 con películas como «Ojos cariñosos»«La simpática huerfanita»y «La pequeña princesa». En 1935, antes de cumplir los 7 años, recibió un Oscar especial «en agradecimiento por su extraordinaria contribución» a la gran pantalla. En plena era de la Gran Depresión, atrajo a los cines a millones de personas y se convirtió en un símbolo nacional, hasta el punto de generar una corriente de mercadotecnia desconocida en la época: muñecas con su aspecto, vestidos y toda una corriente de jóvenes actrices que buscaban replicar su éxito.
Dio sus primeros pasos en el mundo artístico con sólo 3 años, después de que su madre la apuntara a una escuela de danza y fuera descubierta por un cazatalentos. Tras aparecer en «Stand up and cheer», su primer gran éxito llegó en 1934, con «Ojos cariñosos». Actuaba, cantaba y bailaba con apenas cinco años de edad.
Le siguieron títulos como «La pequeña coronela»«La simpática huerfanita»«Pobre niña rica»«La mascota del regimiento», «Heidi»«La pequeña princesa». Su imagen, con su gesto risueño y su pelo rizado, y sus pegadizas canciones, especialmente «On the good ship lollipop», se convirtieron en icónicas para un país que intentaba levantar cabeza después del crack del 29.
La precoz actriz trabajó durante su carrera con directores como David Butler, Walter Lang o John Ford y junto a actores como Cary Grant, John Wayne, Randolph Scott, Lionel Barrymore y Jimmy Durante. En 10 años rodó 40 filmes y alcanzó un estatus de estrella que no conseguía asimilar. «Haces feliz a la gente», le explicaba su madre cuando le preguntaba por qué era tan aclamada.
Su fama comenzó a declinar en la década de los 40, aunque continuó estrenando filmes de forma regular, como «Quiero ser mujer», «El solterón y la menor»«Fort Apache». En 1949 dejó el mundo de la actuación, con sólo 21 años; todo iba muy rápido en su vida. Regresó a la pequeña pantalla en 1958 con la serie «Shirley Temple's Storybook». En 1963 puso fin definitivamente a su etapa artística.
CARRERA POLÍTICA
Tras el intento fallido de reflotar su carrera en la pantalla, Temple orientó sus pasos hacia la política. Se había sentido atraída después de que su marido fuera convocado en Washington para retomar su labor en la Marina. Involucrada en el Partido Republicano, en 1967 Temple se presentó sin éxito al Congreso por el estado de California. A pesar de este intento fallido, la exactriz ayudó a recaudar más de dos millones de euros en la campaña de reelección del presidente Richard Nixon.
Nixon la designó delegada ante Naciones Unidas en 1969, y en 1974 fue nombrada embajadora de Estados Unidos en Ghana, cargo que ocupó hasta 1976. Ese año se convirtió en la primera mujer que ostentaba el puesto de Jefa de Protocolo de su país. En 1989 regresó a la carrera diplomática, como embajadora en Checoslovaquia.
«No tengo ningún problema en ser tomada en seri como mujer y diplomática», declaró al tomar posesión de su cargo en la Embajada Checa. «Mis únicos problemas han sido con personas que, al principio, se negaban a creer que había crecido desde mis películas». Su llegada al país centroeuropeo no estuvo exenta de fricciones: al presidente Gustav Husak no le gustaba que Temple hubiera presenciado en 1968 la represión de la Primavera de Praga. Había acudido a una conferencia sobre la esclerosis múltiple.
VIDA PERSONAL
Temple estuvo casada en dos ocasiones. La primera en 1945, con solo 17 años, con John Agar, militar que dio el salto al cine y compartió rodajes con su esposa en «Fort Apache» y «Aventura en Baltimore». El matrimonio, fruto del cual nació una niña, se rompió en 1949. En 1950 Temple se volvía a casar con un hombre de negocios, Charles Alden Black, a quien conoció en Hawai y con quien permaneció casada durante 54 años hasta la muerte de éste en 2005. Habían tenido dos hijos.
En 1972 le fue diagnosticado cáncer de pecho, que superó de forma satisfactoria mediante una mastectomía. Una operación de la que habló en público, convirtiéndose en una de las primeras mujeres que divulgaban detalles sobre esta enfermedad. En 1988 publicó su biografía, «Child Star».


Tomado de ABC.es

viernes, 31 de mayo de 2013

VIDEO: este el diario que escribió Heath Ledger para interpretar al Joker

VIDEO: este el diario que escribió Heath Ledger para interpretar al Joker

El papá del fallecido actor mostró el contenido del cuaderno en el que se ven figuras y anotaciones relacionadas con el personaje que le valió un Oscar

(YouTube)

(elcomercio.pe) La interpretación del Joker, uno de los rivales principales de Batman, a cargo de Heath Ledger para la película “The Dark Knight”, es quizá la más recordada de los últimos años. A través de sus gestos, su actuación y su locura, Ledger pudo dejar una huella que le valió un Oscar póstumo.

El método que usó el actor que falleció a los 28 años fue innovador. “Me encerré en un cuarto de hotel en Londres por un mes, creé un pequeño diario y experimenté con voces. Era importante hallar la voz icónica y la risa. Terminé aterrizando en el ámbito de lo psicópata: alguien que casi no es consciente de sus actos”, dijo para Empire en 2007, un año antes de morir.

Más de cinco años después de su muerte, el mencionado diario ha salido a la luz. El cuaderno personal de Ledger no solo se ha conservado, sino que está en manos de su papá, Kim, quien lo guarda cerca al Oscar que ganó su hijo por interpretar al villano.

En el cuaderno se ve que Ledger se inspiró mucho en Alex, el protagonista de “La naranja mecánica” de Kubrick, interpretado por Malcolm McDowell, así como fotografías de ensayos y del maquillaje final que usó en la película de Batman.

“La escena del hospital es interesante porque, cuando era niño, a su hermana Kate le gustaba disfrazarlo como enfermera y él era muy gracioso”, dijo Kim Ledger para el documental alemán “Too young to die”.

viernes, 12 de abril de 2013

60 Años de "Casino Royale": la primera novela del agente 007

60 Años de "Casino Royale": la primera novela del agente 007

Libro de Ian Fleming relata los primeros pasos de un héroe de ficción con licencia para matar

60 Años de
"Casino Royal" está de aniversario. (Foto: AP)


(EFE). “Casino Royale”, la novela en la que Ian Fleming inventó al carismático James Bond, el agente secreto británico más famoso del planeta, sopla 60 velas con la frescura intacta y la continuidad de la saga garantizada.

Fue con ese libro, publicado el 13 de abril de 1953 y que relata los primeros pasos de un 007 con licencia para matar, con el que el escritor londinense arrancó una de las sagas de acción más trepidantes del mundo literario.

El éxito comercial no tardó en catapultar su adaptación a la gran pantalla, con tres versiones: una primera para televisión en 1954 y otras dos para el cine, en 1967 y en 2006, dirigida este última por el neozelandés Martin Campbell y con el actor británico Daniel Craig por primera vez en la piel de Bond.

En “Casino Royale”, un 007 aún inexperto en los laberintos del MI6 resulta crucial para abortar un atentado terrorista contra el aeropuerto de Miami. Y ya entonces deja entrever sus efectivas dotes de seductor, cuyo objeto de deseo era, entonces, su colega Vesper Lynd.

El creador de este héroe de ficción, Ian Fleming, se nutrió de su propia experiencia como asistente en los servicios secretos británicos para captar la atmósfera que destilan sus novelas de espionaje, 14 en total sobre James Bond.

En ellas es ya casi un cliché hallar a su protagonista con una copa de Martini en la mano, conduciendo su flamante Aston Martin y rodeado de mujeres esculturales.

Además de las andanzas del carismático detective, el escritor británico escribió cuentos infantiles como “Chitty Chitty Bang Bang” y su obra gozó de un notable éxito comercial en los años 50, que permitió a Fleming retirarse en Jamaica.

Tras la muerte del escritor en 1964, seis autores asumieron el reto de continuar escribiendo la saga Bond. El último en enfrentarse al personaje de Fleming fue el autor estadounidense de novela negra Jeffery Deaver, que en 2011 desarrolló el lado más humano del célebre agente secreto en “Carta blanca”.

Actualmente el escritor británico William Boyd, autor de “Un buen hombre en África” (1987) y “Las aventuras de un hombre cualquiera” (2002), prepara la próxima novela sobre el icónico agente, que se publicará en septiembre.

Según ha desvelado Boyd, la trama transcurrirá en 1969 y retratará la madurez del famoso espía, ya con 45 años y residente en el selecto barrio londinense de Chelsea.

A lo largo de los años, el nombre de Bond se ha convertido en una “marca” garante de éxito comercial.

Aprovechando ese tirón, el 60 aniversario literario del espía más irresistible del globo ha propiciado que Michael L.Van Blaricum, considerado el mayor coleccionista de Bond y Fleming, inaugure una exposición en la Biblioteca de Manuscritos y Libros Raros de la Universidad de Illinois (EEUU) con artículos, ilustraciones y manuscritos que ilustran la “bondmanía” a lo largo de las décadas.

Van Blaricum, fundador en 1992 de la Ian Fleming Foundation, dedicada a preservar los trabajos literarios del escritor, se fascinó por ese personaje cuando tenía 14 años con el filme “Goldfinger” y comenzó años después a coleccionar parafernalia relacionada con el espía.

En esta exposición, inaugurada hoy hasta el 12 de julio, se exhiben, entre otros objetos, una copia de un manuscrito de un relato de Fleming (1908-1964), docenas de ediciones de sus libros, traducciones, parodias de “Casino Royale” y las primeras ediciones de todas las novelas de Bond con sus portadas originales.

El pasado 5 de octubre se celebró el 50 aniversario del estreno de la primera película de la saga, “Dr. No”, un acontecimiento que los seguidores del agente 007 festejaron en todo el mundo con música, ciclos de cine, exposiciones y subastas.

Ese mismo mes se estrenó en Londres la última entrega de la franquicia, la exitosa “Skyfall”, en la que Daniel Craig salvaba al mundo de un pérfido villano interpretado por el español Javier Bardem, dirigida por Sam Mendes

jueves, 21 de febrero de 2013

Campañas promocionales y gastos millonarios: cómo es el camino al Oscar

Campañas promocionales y gastos millonarios: cómo es el camino al Oscar 

Valeria Perasso 
BBC MundoLos Ángeles Jueves, 21 de febrero de 2013
Cuentan que Mary Pickford, actriz icónica del temprano cine estadounidense, quería con desesperación un Oscar. Corría 1929, había protagonizado "Coquette" y decidió promocionarse organizando una fiesta para los votantes de la Academia del Cine, que por entonces eran apenas cinco. Tuvo éxito en su campaña: ganó la estatuilla como mejor actriz.
Ha pasado mucha cinta en Hollywood desde entonces, pero la competencia por captar la atención de quienes deciden los destinos del premio mayor de la industria no ha hecho sino acrecentarse: las campañas por el Oscar, que encaran los estudios y productoras para empujar sus películas, son un negocio en sí mismas.
Con el cierre de la votación, cinco días antes de la ceremonia del domingo, los más de 5.800 miembros de la Academia del Cine estadounidense han tenido oportunidad de votar en 24 categorías en disputa. Y, según los expertos del sector, la danza de dólares para tratar de captar su atención ha superado las inversiones de años anteriores.
Se ha gastado en fiestas y eventos públicos en los que se garantiza la presencia de los actores. En avisos publicitarios que se encabezan con la leyenda “Para su consideración” y llenan las páginas de publicaciones especializadas en cine. En el envío de DVDs y material promocional para que incluso aquellos votantes que no han visto las cintas en las salas puedan tomarlas en cuenta.
"Es como una campaña política: uno quiere la oportunidad de que la gente vea y escuche y, si se logra la atención, la película luego hará lo suyo y sumará votos", dice a BBC Mundo Marian Koltail-Levine, vicepresidenta de filme y marketing de PMK-BNC, una de las empresas más requeridas en Hollywood para la labor de promoción.

Como en política

La comparación del camino hacia el Oscar con la carrera por la Casa Blanca no es descabellada: en la industria del cine, es vox populi que una mano hábil para guiar a un filme por la temporada de premios -que comienza con los Globos de Oro en enero y culmina casi dos meses después- es clave para inscribirlo en la historia y, cómo no, para ayudarlo en la taquilla.
Las tácticas no difieren demasiado de las que se ponen en juego en las campañas electorales. Aquí también hay lobistas, búsqueda de alianzas, cambios de estrategia según los resultados que arrojen los galardones previos al Oscar, que hacen las veces de las “elecciones primarias”.
Y, como en política, los analistas coinciden en que es imposible ganar un Oscar sin gastar dinero.
Aunque los estudios no revelan cuánto invierten, un reporte del diario "Los Angeles Times" calcula que este año, por primera vez, las campañas de las dos favoritas a mejor película, "Argo" y "Lincoln", superaron la marca de los US$10 millones durante las últimas semanas.
El hecho de que grandes estudios -Warner Bros. y Disney, respectivamente- estén detrás de estos títulos ha hecho crecer la promoción, señalan algunos.
Lo mismo ocurre con las también nominadas a mejor película "Los Miserables" (de Universal Pictures y con un elenco multiestelar) o "Django sin cadenas" y "Silver Linings Playbook" ("El lado bueno de las cosas"), que tienen detrás a la poderosa The Weinstein Company.
Para otros, la clave está en la competencia misma: como hace tiempo no ocurría, la nominación de nueve cintas de calidad ha aumentado el suspenso en torno a cuál se llevará la principal estatuilla, en una categoría que completan "Life of Pi" ("Una aventura extraordinaria"), "Beasts of the Southern Wild" ("Bestias del sur salvaje"), "Zero Dark Thirty" ("La noche más oscura") y la austríaca "Amour".
"El desafío es lograr que los votantes de la Academia vean el filme. Pero eso lleva tiempo y dinero: lo hacemos con proyecciones y enviando material directamente a los votantes", relata Koltail-Levine, que este año está involucrada en las campañas de "Beasts…" y "Silver Linings Playbook".

"Humanizar" el filme

No se trata sólo del premio a mejor película, sino que este año también las categorías de mejor director, actriz principal y actor de reparto se consideran abiertas, lo que ha llevado a multiplicar los eventos promocionales en los que las figuras del elenco son la "carta fuerte", señalan los expertos.
"Hacemos reuniones y fiesta de cocteles para que los votantes se reúnan con los que hacen las películas. Si uno logra humanizar la película, es probable que consiga más votos", afirma a BBC Mundo el publicista Joshua Jason, que lleva diez años en el negocio y en esta edición representa a dos de los cortos en competencia y a “Frankenweenie”, del director Tim Burton.
"El marketing es tan importante como la calidad propia de la película. Se trata de orquestar toda la campaña, pero con un filme detrás que la soporte", sugiere Santiago Pozo, que fundó la agencia Arenas hace 25 años y actualmente trabaja en la llegada a salas de la película hispana "Bless Me, Última".
Para el Oscar, el esfuerzo de mercadeo se recrudece: basta tomar una publicación especializada como "Variety", "The Hollywood Reporter" o "TheWrap" para ver una sucesión de avisos a página completa destinados "a la consideración" de los votantes, que presumiblemente leen tales medios.
Los anuncios vienen, en ocasiones, acompañados de DVDs con extras o "cartas de agradecimiento" anticipadas firmadas por las estrellas.
“Lo que ha cambiado mucho en los últimos diez años es la cantidad de actividades que se organizan para los miembros, desde cenas y pases (proyecciones) de la película hasta materiales que sólo los miembros de la academia recibimos”, indica Pozo, que integra la Academia del Cine desde 1993.

Nuevas reglas

La estrategia de seducción de quienes deciden el Oscar no es nueva: a la historia que circula sobre Mary Pickford se suman otros esfuerzos más recientes y documentados por conseguir el hombrecillo dorado.
El crítico Steve Pond, de TheWrap, recuerda que Joan Crawford fue responsable de la que podría considerarse como la primera campaña estructurada: en 1946, esta actriz contrató al publicista Henry Rogers para ponerla a competir por el Oscar por su papel en "Mildred Pierce".
Cuando Crawford, segura de que perdería, se negó a asistir a la ceremonia, Rogers difundió un comunicado diciendo que la actriz estaba enferma en su casa y mandó para allí a un maquillador y un peluquero, por si acaso resultaba elegida. Lo fue, y la foto de la ganadora en cama con su Oscar, captada por los fotógrafos enviados por el publicista, eclipsó a los demás ganadores.
En 1956, señala Pond, el drama "Marty" fue el primer filme cuyo costo de producción fue menor al de su campaña promocional, mientras que la novedad de distribuir screeners (como se llama a las copias para ver en el hogar) le dio un empujón a "Corazón valiente" en 1996, frente a la favorita en los pronósticos, "Apollo 13".
Los gastos, en tanto, han ido en aumento: en 1999, los expertos calcularon que "Shakespeare enamorado" tuvo detrás una campaña de US$15 millones, mientras que DreamWorks dedicó más de US$20 millones en 2001 a apoyar "Gladiador".
Para evitar ciertos excesos, la misma Academia del Cine cambió las reglas: en 2011 estableció restricciones para nivelar el terreno de juego y ayudar a que las películas de menor presupuesto publicitario tengan opciones frente a los productos de los grandes estudios.
Entre ellas, se limitó el material gratuito que puede entregarse a los votantes, así como las fiestas promocionales después de que se anuncian las nominaciones.
“Las nuevas reglas han equiparado en parte las posibilidades, ahora es más fácil saber qué podemos hacer y qué no”, señala Joshua Jason.
Pero algunos excesos siguen ocurriendo, reconocen publicistas y votantes. Por caso, en estos días se comenta la presunta "campaña negativa" contra "Zero Dark Thirty" y "Lincoln", la primera señalada por su supuesto mensaje "a favor de la tortura" y la segunda por sus inexactitudes históricas, cuando la Academia prohíbe expresamente las "corrientes de rumores negativos" contra películas rivales.
En 2010, al productor de "The Hurt Locker" se le prohibió asistir a la ceremonia después de que la Academia lo responsabilizara por hacer "un comentario derogatorio" sobre su rival "Avatar".
Ahora, ¿qué tanto sirven estas campañas intensas para modificar las opiniones de quienes adjudican los Oscar?
Los votantes dirán que ellos se rigen por sus patrones de calidad para elegir al mejor en cada categoría. Pero, tal como señalan los publicistas, es difícil que un filme sea elegido si no se sabe de su existencia.
"Los miembros de la Academia no van a nominar una película si no la conocen o no la vieron. A veces, el éxito de una campaña se mide por eso: por hacer que una película que estaba fuera del radar quede nominada", señala Koltail-Levine.
Las cifras parecen darle razón: una investigación publicada en el "Journal of Cultural Economics", en 2005, estima que las candidatas a mejor cinta pueden incrementar su recaudación en hasta 200% en las semanas siguientes a ser elegidas. Y sugiere que es la nominación, y no el Oscar, la que realmente afecta los balances finales de la taquilla.






domingo, 21 de octubre de 2012

De los libros a la pantalla grande


De los libros a la pantalla grande

Domingo 21 de octubre del 2012 | Perú21.pe

No es novedad que Hollywood recurra a famosas sagas para repetir el mismo éxito en el cine. Aquí algunos de los filmes más exitosos.

(Agencias)
(Agencias)


La mayoría de las veces, las versiones fílmicas han logrado representar a cabalidad la versión original. En otros casos, la diferencia es abismal pero, finalmente, tanto el libro cono la película se beneficia.
EL SEÑOR DE LOS ANILLOS
El escritor británico J.R.R.Tolkien publicó en 1954 el libro que daría inicio a una de las sagas más exitosas de todos los tiempos. A la fecha se han vendido más de 300 millones de libros en todo el mundo. Mientras que la triología cinematográfica recaudó US$ 2,915’155,189 millones.

EL PADRINO
En 1969 se publicó en EEUU la obra maestra de Mario Puzo: El Padrino. El libro que narra la vida de una familia de inmigrantes italianos mafiosos lleva vendidos cereca de 30 millones de copias a nivel mundial. Tres años después de su publicación, el director Francis Ford Coppola llevó la historia al cine y se convirtió en un clásico recaudando US$ 245’066,411 millones en taquilla.

CREPÚSCULO
La saga de vampiros más exitosa de los últimos tiempos vio la luz en 2005 y desde entonces ha vendido alrededor de 116 millones de ejemplares. Su creadora es Stephenie Meyer, un arma de casa mormona. La productora Summit Entertainment decidió llevarla al cine en 2008, logrando recaudar hasta ahora US$2,528’379,328 millones.

JAMES BOND
La saga del espía más famoso el mundo se empezó a publicar en 1954 y, desde entonces, más de 100 millones de ejemplares se han vendido en todo el mundo. En 1962 comenzó la aventura cinematográfica del 007 que, con sus 23 películas, ha recaudado US$ 3,000’000,025 millones.

HARRY POTTER
Las aventuras del joven aprendiz de mago Harry Potter se publicaron por primer vez en 1997. A la fecha se han vendido cerca de mil millones de libros de la saga. Warner Bros. le compró los derechos a su autora, J.K.Rowlingpara llevar la saga al cine y ha recaudado US$ 7,743’849,053 millones.

martes, 2 de octubre de 2012

James Bond: el glamoroso agente 007 cumple 50 años

James Bond: el glamoroso agente 007 cumple 50 años

El espía debutó en la pantalla grande con “El satánico Dr. No” el 5 de octubre de 1962. Roger Moore interpretó a Bond en siete películas, más que cualquier otro actor

James Bond
Roger Moore en el papel de James Bond. (Foto: AP)
 
(AP). Fue el encuentro de las dos personalidades británicas más famosas del planeta: la reina Isabel II se volteó a ver a su elegante invitado y le dijo, “Buenas tardes, señor Bond”.

La unión de este par de íconos, la monarca inglesa y el rey de los espías – en una película para la ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos de Londres – fue un momento emocionante. Apenas importa que uno de los personajes sea ficticio. El agente 007 es real para millones de cinéfilos, que una vez más acudirán en masa a verlo luchar por la reina y su país cuando la 23 entrega oficial de la serie, “Skyfall”, se estrene este año.

Han pasado muchas cosas desde que se dio a conocer hace 50 años, el 5 de octubre de 1962, con la modesta cinta de espías “El satánico Dr. No”. La producción presentó a un agente secreto pulcro pero mortífero que lucía trajes de los sastres más finos de Londres, conducía un Aston Martin, prefería sus martinis agitados, no revueltos, y se presentaba como “Bond, James Bond”.

¿Cuál es el secreto de su supervivencia? Su familiaridad, dice Roger Moore, quien interpretó a Bond en siete películas, más que cualquier otro actor.

“Es como un cuento infantil: mientras uno no se aleje demasiado del original, el niño estará feliz”, dijo Moore. “El público recibe lo que espera: chicas hermosas, acción, artilugios. Es una fórmula”.

Esa formula extraordinariamente exitosa tuvo inicios modestos. Dos productores advenedizos, el canadiense Harry Saltzman y el estadounidense Albert “Cubby” Broccoli, adquirieron los derechos de una serie de novelas de Ian Fleming, oficial de inteligencia durante la Segunda Guerra Mundial que creó al agente 007 como una especie de alter ego de fantasía.

Saltzman y Broccoli contaron con un presupuesto de apenas un millón de dólares, pero con una mezcla de suerte y diseño reunieron a un increíble equipo de talento frente y detrás de cámaras.

Sean Connery, un actor escocés relativamente desconocido y ex culturista, fue seleccionado como Bond en contra de los deseos de United Artists, que querían para el papel a un astro reconocido como Cary Grant.

“Everything or Nothing”, un nuevo documental sobre las películas de James Bond, dice que el sello de aprobación final provino de la esposa de Cubby Broccoli. “¿Te parece sexy?”, le preguntó Broccoli.

CONNERY OBTUVO EL ROL

Detrás de cámaras estaban artistas como John Barry, compositor del emblemático tema musical de Bond; Maurice Binder, quien creó la famosa secuencia de títulos con un caño de pistola; y el diseñador Ken Adam, un ex piloto de guerra de la Fuerza Aérea británica nacido en Alemania cuyos escenarios futuristas le dieron al filme su moderno look.
 

lunes, 27 de febrero de 2012

Los que se atrevieron a rebelarse contra los Óscar

Los que se atrevieron a rebelarse contra los Óscar

Un actor rechaza el más grande galardón de Hollywood. Una actriz acepta haber recibido drogada un premio. Aquí, las acciones más combativas de la ceremonia
Domingo 26 de febrero de 2012 - elcomercio.pe
Oscar
MARÍA PÍA BARRIENTOS @pia_barrientos
Redacción online

El óscar tiene dos características básicas: es la mezcla perfecta de prestigio con farandulización. Puede ser que haya perdido audiencia, pero su ceremonia sigue siendo vista por millones y no ha perdido su clase. Es por eso que, a pesar de que los premios MTV sean la Gomorra de los excesos y los Globos de Oro se pongan cada vez más sarcásticos (no por gusto eligieron a Gervais como conductor por dos años consecutivos), la Academia se empeña en conservar, con uno que otro cambio, su misma línea. Sin embargo, algunos rebeldes llegaron para generar el caos. Unos lo hicieron a propósito, otros sin querer, algunos simplemente por descontrolados. Sea como sea, consiguieron llamar la atención por salirse del esquemático guión de Hollywood, del cajón de lo predecible. Aquí los actos heroicos y las actuaciones sin sentido de los que se atrevieron a sacarle la lengua al doradísimo Óscar en su propio casa y en su día.
EL DISPARO DEL PADRINO
Aunque parecía mucho mayor, Marlon Brando tenía solo 48 años cuando interpretó uno de los papeles más recordados de su larga y camaleónica trayectoria: a Don Vito Corleone, el mismísimo padrino. El actor triunfó por un rol que hasta hoy el mundo continúa aplaudiendo. Estaba cantado: en la ceremonia de los Óscar, la Academia tendría que rendirse ante los pies del siempre errático Brando. Del hombre que tenía más de 11 hijos, el que en algún momento vivió como un ermitaño y murió casi como un indigente. El que, según su esposa, era bisexual, el que alcanzó la fama prodigando belleza y ‘sex appeal masculino’, para luego aparecer gordo y totalmente diferente e igual triunfar. Pero a pesar de que, gracias a “El padrino”, por fin había logrado volver a ser aceptado en la industria tras pasar un tiempo sin ser considerado para ningún papel, Brando se atrevió a decirle: “gracias, pero no”, al mismísimo Óscar. El actor se negó a aceptar el galardón a Mejor Actor en la ceremonia de 1973 y en vez de ir él mismo a decírselo de frente mostró su indiferencia enviando a una mujer para que lo hiciera por él.

Así, la activista indoamericana ‘Sacheen Littlefeather’ fue quien se acercó al escenario. Cuando el presentador le extendió la dorada estatuilla ella negó con la mano y en su discurso explicó de manera muy educada que el actor había decidido rechazar al buen Óscar. ¿La razón? Estaba en contra de cómo eran tratados los indios americanos por la industria cinematográfica de la época. Un cuchillada limpia y directo a la yugular del dorado hombre del cine. (Mira el videoaquí).
LA MELODÍA PRECURSORA DE JORGE DREXLER
“Diarios en motocicleta” abrió los ojos de muchos. Un elenco de impacto encabezado por Gael García Bernal rompió con varios esquemas, mientras el elenco y las locaciones impactaban y se mostraban sumamente verosímiles. Una creación del uruguayo con garra Jorge Drexler encajaba a la perfección en el rompecabezas que era la cinta sobre el viaje del ‘Che’ Guevara. “Al otro lado del río” sorprendió hasta en el reino del inglés, “Hollywood”, donde probablemente no entendían la simplicidad del tema del cantautor charrúa. Sea como sea su creación musical fue nominada a la categoría de Mejor Canción en los Óscar de 2005. Sin embargo, la Academia no le permitió a Drexler entonar su propia canción. Dijeron que su rostro era poco conocido y lo reemplazaron por Antonio Banderas y Carlos Santana, quienes ni siquiera participaron en la película o en la canción. Drexler aceptó el rechazo del longevo Óscar estoicamente, sin bajar la cabeza. ¿Acaso no dicen que la venganza es un plato que se come frío?

Ya sea a propósito, sin querer queriendo o producto de un plan calculado al milímetro, Jorge Drexler consiguió cobrar las cuentas pendientes con la dorada Academia. Óscar se atrevió a convertirlo en triunfador y él encontró el momento perfecto para dar el gran golpe. Al acercarse al micrófono, el uruguayo empezó a entonar una melodía conocida: era su propia canción, esa que no lo dejaron cantar. No aprovechó su tiempo para agradecer a propios y extraños ni hablar de la felicidad desbordante. Drexler se limitó a cantar y salirse así con la suya, embistiendo así a Óscar de una forma más que elegante. “Chau, gracias”, dijo el cantautor tras entonar su himno de libertad. (Mira el video aquí).
WHOOPI, LA QUE FUE A RECIBIR A ÓSCAR DROGADA
En 1989, antes de que se celebrara la ceremonia, “El Color Púrpura” se intuía como la ganadora: había sido nominada a 11 categorías. Esto de por sí ya marcaba un hito: la cinta era una directa crítica a la antigua sociedad americana, tierra de nadie en la que, según el punto de vista de la cinta del gran Steven Spielberg (quien cuando quiere, se trataban a los afroamericanos como a los judíos antes de que estallara la Segunda Guerra mundial en la Alemania nazi). Todo esto, en un país que aún no ha logrado deshacerse del todo de sus complejos racistas. Pues al generalmente tradicional Óscar no le dio la gana de otorgarle siquiera un premio a la obra maestra. Ni Spielberg ganó, ni Oprah Winfrey consiguió ser destacada por su magnífico rol como actriz de reparto, ni Whoopi Goldberg logró ser consagrada gracias a su magnífica interpretación de la sumisa y luego combativa Celie. Pues el lacrimógeno filme se convirtió en una de las películas más perdedoras de la historia de los premios. Cinco años después, Whoopi volvería para reclamar lo suyo a su manera.

Aunque suene difícil de creer Whoopi se hizo acreedora a un óscar a Mejor actriz de reparto por su interpretación de una vidente en “Ghost”. Pues, cuando ganó por fin la presea, la actriz fue a recibirlo estando totalmente dominada por la verde marihuana, como lo confesó luego. La intérprete consumía tabaco y cannabis de forma habitual y pensó en la marihuana como remedio contra la inquietud que le producía la incertidumbre de volver a ver a Óscar. “Así que me fumé ese maravilloso porro que fue el último de mi cosecha casera”, declaró Goldberg, quien aseguró que cuando anunciaron que era la ganadora tuvo que concentrarse para llegar hasta el escenario y recoger el galardón. Tal vez la Academia no se enteró de la travesura de Whoopi hasta ahora, pero, condenable o no, tal vez este gesto fue también una sacada de lengua scereta de la gran artista. (Mira el video aquí).
EL RECHAZO PERPETUO DE LA MEJOR ACTRIZ
Antes de que Meryl Streep fuera considerada la mejor actriz de la historia, la genial Katharine Hepburn se llevaba todos los elogios. Pues el talento de esta leyenda del cine la llevó a ganar en 4 ocasiones una dorada estatuilla a Mejor Actriz. Sin embargo, ni una sola vez se atrevió a ir a recoger el obsequio que el juez de Hollywood le extendía.

Solo en 1974, antes de ganar por cuarta vez, la intérprete fue a la gala. Llegó vestida con un pantalón y una sencilla chaqueta negra. No le gustaban las apariciones públicas y menos el glamour que exigía Hollywood. Anunciaría al ganador del premio honorífico Irving G. Thalberg Memorial Award: Lawrence Weingarten. Cuando ingresó, Hollywood la reverenció de pie. No paraban de aplaudir. Abrumada, saludó a Óscar. “Muchismas gracias. Estoy muy feliz de no haber escuchado a nadie decir: ya era hora. Soy la prueba viviente de que una persona puede esperar 41 años para dejar de ser orgullosa”, dijo Hepburn en esa ocasión. (Mira el video aquí).
Tal vez, después del discurso, la Academia pensó que la genial actriz había decidido reformarse y unirse al estelar redil. Si fue así, en definitiva se equivocó. La reina ganó una vez más y volvió a faltar el día en el que se convirtió en la actriz que más estatuillas ganó.
¿Será que alguien se atreve a rebelarse contra las reglas de la Academia en la ceremonia de este año? Solo queda esperar unas horas para descubrirlo.